Según un relevamiento difundido por el Gobierno Provincial, más del 37% de la población del conurbano capitalino vive en situación de pobreza.
El 6,6 por ciento de la población en el conurbano cordobés vive en situación de indigencia, y un 37,9 por ciento vive en situación de pobreza. El dato es resultado del trabajo de Monitoreo de Condiciones de Vida la ciudad de Córdoba y sus alrededores, correspondiente al segundo semestre de 2022. Los datos se dieron a conocer en la tarde del miércoles, e indican que unas 111 mil personas de ese sector de la provincia no tiene ingresos suficientes para cubrir la canasta básica de alimentos y vestimenta, mientras que otras 640 mil personas no llegan a cubrir los servicios y costos de una canasta básica total.
El estudio pone el acento sobre el impacto de los «planes no monetarios» para lograr palear la situación de pobreza e indigencia en esa importante concentración demográfica. De este modo, se informó que al menos el 92 por ciento de las personas que se encuentran en situación de indigencia, y el 89 por ciento de quienes se encuentran bajo la línea de pobreza, son beneficiarios de al menos uno de los programas de asistencia social que brinda el gobierno provincial.
Programas alimentarios como Paicor, «más leche más proteínas», alimentos para celíacos, comedores (copa de leche) o comedores adultos mayores; programas de transporte como el boleto estudiantil, el boleto obrero, el boleto adulto mayor o el boleto social; o subsidios a tarifas como la energía eléctrica, el agua o el impuesto inmobiliario; alcanzan a más de 101 mil personas en situación de indigencia y a 570 mil personas en situación de pobreza.
En este estudio no se revela la situación de las personas si no recibieran otros subsidios estatales, como la Asignación Universal por Hijo o el Plan Primer Paso, sin los cuales los porcentajes de pobreza e indigencia serían aún más altos.
Los planes no monetarios brindados por el gobierno provincial permiten que 34 mil personas pasen de situación de indigencia a situación de pobreza, y que 13 mil personas dejen de estar en condición de pobreza.
Con este impacto, estos planes de asistencia reducen el número de personas en condición de pobreza a 627 mil personas, y el de personas en situación de indigencia a 77 mil.
Sin embargo, el estudio arroja que entre el primer y segundo semestre de 2022, la pobreza aumentó un 0,8 por ciento, y la indigencia creció un 1,8 por ciento en el mismo período. Esto significa que a lo largo de 2022, unas 5 mil personas cayeron en la pobreza y unas 2 mil pasaron a ser indigentes en ese sector, el más poblado de la provincia.
En los últimos cinco años, el porcentaje de pobreza en el conurbano cordobés creció del 29,9 por ciento de la población al 37,9 por ciento. El índice de indigencia también ascendió, pasando del 4,3 por ciento al 6,6% de la población, siempre según los indicadores oficiales.
El pico de crecimiento de los indicadores de vulnerabilidad económica ocurrieron en el primer semestre de 2021, cuando en plena pandemia la pobreza alcanzó el 45 por ciento de la población, y la indigencia llegó hasta el 9 por ciento.
La investigación, que contó con la asistencia técnica del Instituto de Estadística y Demografía de la Facultad de Ciencias Económicas (UNC), relevó 1.300 viviendas de las localidades de Córdoba capital, Agua de Oro, Canteras El Sauce, El Manzano, La Calera, La Granja, Malvinas Argentinas, Mendiolaza, Río Ceballos, Saldán, Salsipuedes, unquillo, Villa Allende, Villa El Fachinal, Parque Norte, Guiñazú Norte.
El informe completo y los detalles de la investigación se encuentran publicados en el sitio estadistica.cba.gov.ar.