Nuestra localidad necesita del turismo, tanto como el turismo necesita de Tanti para descansar. Pero preservar nuestra localidad y la calidad de vida para su población, es un objetivo que no podemos perder de vista.
A pesar de que cada vez son más las personas que eligen Tanti para vivir, la nuestra sigue siendo una localidad turística por excelencia, que cada verano duplica la cantidad de personas que la habitan y nos convierten, al menos por unos meses, en una ciudad, con otros ritmos, con otro tránsito y con otra actividad económica.
Pero que Tanti sea un destino turístico no debe hacernos olvidar que es justamente el respeto lo que hace que las personas elijan este lugar (para vivir o para descansar). El respeto por la naturaleza, que nos permite tener hermosos paisajes, por las normas de convivencia social y por las personas, tanto las que llegan como las que las reciben.
Sin embargo, es con la llegada del turismo que aparecen situaciones que encienden las alarmas y nos advierten que esta necesaria actividad, no puede ser un huracán que arrase con nuestro ambiente, nuestra calma y nuestra economía.
Días atrás, la Policía Ambiental detuvo a tres personas oriundas de Córdoba Capital, que circulaban con armas de fuego, un ave y un cordero muerto, aparentemente frutos de la caza ilegal.
Este fin de semana, un vecino de uno de los barrios del este de Tanti reportó como una familia entera circulaba en cuatriciclos, sin patente, algunos de ellos conducidos por menores de edad, generando un ruido perturbador, y como si las calles de los barrios se trataran de circuitos recreativos de vehículos todo terreno.
En días recientes, una organización ambiental local nos envió imágenes de la basura que todos los lunes salen a recoger del cauce de los arroyos, abandonada allí por turistas indolentes y desaprensivos.
También nos llegan reportes de cómo algunos locales de productos de primera necesidad, en afán de aprovechar la capacidad de gasto de los turistas, suben sus precios de manera exagerada, perjudicando económicamente a los habitantes locales.
Durante noviembre, ingresaron al Concejo Deliberante de Tanti reclamos por locales nocturnos que realizaban fiestas con música a decibeles mayores de los permitidos, perturbando la tranquilidad de los vecinos.
Encontrar los arroyos llenos de basura, ver turistas lavando sus vehículos impunemente en los ríos, circulando por las calles en vehículos recreativos (motos, cuatriciclos o camionetas) como si se tratase de circuitos deportivos, matando nuestra fauna silvestre solo por diversión, son prácticas que destruyen el contrato de hospitalidad entre turistas y habitantes, porque no son respetuosas con el lugar, ni con la población que, gentilmente, recibe a los visitantes.
Pero también rompe el contrato con la comunidad cuando los emprendimientos de la propia localidad, en afán de “salvar el año” en pocos meses, perturban la paz y la tranquilidad con ruidos molestos a cualquier hora, o con precios delirantes en productos de consumo habitual de la población, por dar solo dos ejemplos.
Que contemos con herramientas para hacer respetar a Tanti y a su gente, depende de nuestro gobierno local. Que las usemos para proteger lo que tenemos, depende de cada ciudadano y de cada visitante.
El verano va a terminar, y tanto habitantes como visitantes, necesitaremos tener para los próximos meses, los próximos veranos o las próximas generaciones, un Tanti tranquilo, limpio, con su naturaleza intacta y con calidad de vida para sus vecinos.
EXCELENTE COMENTARIO
ME PREGUNTO SI LA GENTE.QUE ES TAN SUCIA Y DESAPRENSIVA MANTIENE SUS CASAS Y.JARDINES.
CON LA MISMA MUGRE QUE DEJA EN NUESTROS ARROYOS Y PLAZAS.GRACIAS
Frente al impacto que genera el turismo, tanto el cuidado de nuestro medio ambiente como el de nuestra economia y otras actividades, se necesita de la implementacion de políticas públicas permanentes y eficaces. Quienes deben implementarlas no lo estan haciendo, pues tienen una mirada economicista de alcance cortoplacista y para unos pocos. Excelente nota periodistica.
En el balneario la isla música toda la noche alcohol droga y hasta sexo en los rincones del Río. Por qué la lo policía no hace nada? porque la municipalidad no hace nada? Qué esperan? que violen a alguien o que maten? una vergüenza.
Excelente nota periodística. Mientras hace más de 40 años los craneos que gobiernan nuestro pequeño Tanti conjuntamente con quiénes dicen representarnos, léase Concejo Deliberante estan deliberando sobre el PERFIL con que se debe calificar a la localidad, porque según parece fue tan mal hecho el censo que ni siquiera se sabe si es ciudad, continuamos todo patas para arriba.
Un cordero – caza ilegal ?
Dónde nací, le llaman cuatrerismo.
Comparto estas inquietudes totalmente. En nuestro barrio (TANTI Nuevo) estamos padeciendo la abundancia de basura y escombros desparramados cerca de los contenedores. La oscuridad notable a la vera del arroyo que es ingreso al barrio y torna peligroso el acceso y salida del mismo y la circulación de vehículos a altas velocidades que no se adecuan a normativas de zona residenciales. En audiencia publica expuse el tema ante autoridades del municipio y ante mí consulta respecto de controles y cartelería para moderar este tema, me dijeron que a corto plazo podían instalar cartelería, cuestión que aún no se ha concretado . Es insólito tener que hacer estas advertencias, pero no hay alternativas. Vehículos (sin patentes algunos) y a altas velocidades ameritan un urgente control, más cuando algunos circulan por la ruta. Pueden hacerlo en esas condiciones? Cuáles son las normativas y requisitos para quienes los conducen?
Totalmente de acuerdo con la nota ..todo es cierto y se replica en todos los barrios y rios…los de los cuatriciclos es una tortura lo mismo las motos en duro ..flor serrana» barrio de tanti»..siempre olvidado por el municipio. Sufre todo eso mencionado antes …El gobierno municipal brilla por su ausencia
Excelente nota, lamentablemente no se valora la poca naturaleza que aún resiste en nuestras sierras. No solo los turistas, también los locales deberíamos tener mayor respeto y exigir al municipio que proteja y controle, asumiendo cada uno nuestra responsabilidad en el cuidado de este hermoso lugar. Debería aplicarse la Ley Nacional de educación ambiental integral en todas las instituciones de la localidad, para promover la conciencia y acción ambiental.